lunes, 20 de noviembre de 2006

"ESTOY HACIÉNDOME MAYOR"

Es dificil expresar los pensamientos que ahora mismo se cruzan por mi mente. Son tan fugaces... no se como me siento, sinceramente. ¿Desconcertada quizás? No se. La verdad es que ayer me sorprendí de mi misma. He visto un cambio en mi forma de ser drástico, si lo comparo con el de hace tres años. No se. Me veo una persona centrada. Quizá no es madurez en si misma lo que estoy experimentando. Sino un amago de lo que un dia llegará...espero...
He cambiado mucho. Las pocas personas que me conocen de verdad creo que lo habrán notado. Es raro de repente observar que estas creciendo. Pocas veces me había parado a pensar que me “estoy haciendo mayor”. Hacerse mayor....que bonito,no? No estoy muy segura ahora de eso, la verdad.
He visto como ha cambiado mi vida en este tiempo. Una vida entera para mi, pero tan solo tres años para una persona a las puertas de la jubilación.
Una de esas cosas que ha cambiado tanto es que yo siempre he estado sola, desde que ponía un pie fuera de casa de mis yayos. Por muy acompañada que estuviese, siempre me sentía sola. Ahora no.
¿quién soy? Duda existencial.
Es muy subjetivo. Me he dado cuenta que para mi soy un auténtico misterio; para mi madre esa persona que quiere pero no quiere, esa persona que “he hace la vida imposible”,(¿será la edad? Lo dudo); para mi padre esa persona que antes estaba tan cerca, y ahora tan cerca de irse; para mis amigos una amiga; ¿pero para los demás que soy? Nadie.
Llevo gran parte de mi vida viendo la crueldad de las personas. Mientras unos se metían con los extranjeros, las gentes con “pocas luces”...yo me metía a defenderles; no sé. A mi siempre se me ha tratado mal, fuera donde fuera. De pequeña porque estaba “gorda”. Asi de simple. Claro que eso no me lo quité hasta este año. Sino, por las gafas. Claro, después llegó el aparato de los dientes.....y después de eso vino el de la espalda....
Llegué al instituto y era lo mismo. Hasta los catorce. Si no contestaba seguían. Y si contestaba también. Entonces descubrí que por mi....vamos a llamarlo “envergadura física” de entonces, al principio se me respetaba. Luego no. Para darme cuenta tuve que ir con gente que no me conociera. En realidad me gustaba ver que por ir con quién iba, me dejaban. Pero volví otra vez a ser más....como antes.
No me gusta. No me gusta hacerme la tonta. Pero sin embrago, lo hago.
Estoy harta de ver como a las personas no les infundo respeto. Harta.
Hay algunos que incluso deben de pensarse que no me entero, que no me duele.
Pero es que ya estoy harta de que me digan los “mayores” que soy una macarra. No me gusta....antes si.
He comprobado que con “tres hostias” antes se solucionaba todo. Ahora me he dado cuenta de que yo no quiero eso; yo lo que quiero es que me respeten.
En un principio las personas tienen una impresión completamente equivocada de mi. Tengo la fachada de alguien que no soy. ¿quién va a pensar mirándome físicamente que tengo dos dedos de frente, o que me importa mi futuro....o ya directamente que tengo derecho a ser respetada? Me “estoy haciendo mayor”, y no quiero.

No hay comentarios: